MARTES 8 Y JUEVES 10 DE NOVIEMBRE A LAS 18’10H 100 METROS EN CINE ACCESIBLE EN CINES OCIMAX
Las sesiones de Cine Accesible tienen lugar en una sala convencional de exhibición cinematográfica dotada de la tecnología necesaria para la proyección. Atendiendo al principio de no crear espacios de exclusión, estos dispositivos tecnológicos adicionales van dirigidos al público que los necesita y no interfieren en el visionado de aquellos espectadores que no necesiten este apoyos, de manera que las personas con o sin discapacidad puedan acudir al cine juntas.
Así pues, en la sala se instala una pantalla de 5mX0,5m debajo de la pantalla de proyección. En esta pantalla adicional los espectadores con discapacidad auditiva siguen los diálogos de la película en forma de subtítulos. Estos siguen un código de colores utilizado por las personas sordas, que facilita la identificación de los diálogos de cada personaje con un color diferente. Además de los diálogos, se incluyen, a modo de acotaciones, las indicaciones necesarias respecto de sonidos, golpes, gritos, música…, en definitiva, todo aquello que completa la banda sonora de la película aparecerá reflejado como texto. La colocación de una pantalla, además de impedir que determinadas letras de color se pierdan en los fondos de la propia película, permite que los espectadores que no necesiten este apoyo vean la película sin subtitulado incrustado.
Las personas con discapacidad visual disponen de unos auriculares inalámbricos personales que se entregan a la entrada de la sala. A través de estos reciben una banda sonora específica, denominada audio descripción. Esta locución da información de todo aquello que sucede en pantalla y que tenga relevancia para la correcta comprensión de la película. En ella se dan indicaciones de estética, situación de los personajes, reacciones, sentimientos… Todo aquello que es susceptible de ser percibido a través de la vista. Técnicamente se editan lo que se llaman bocadillos de sonido que son lanzados intercalados entre los diálogos de la película, de manera que la persona con discapacidad visual recibe los sonidos originales a través de los altavoces de la sala y la audio descripción por sus auriculares; las personas que no tengan auriculares no percibirán la locución.